Por: Pedro Luis Rueda
10/11/2016
El Real Madrid aprovecha esta pausa de eliminatorias al Mundial Rusia 2018 para redefinir planteamientos luego de informar la lesión de uno de sus mejores hombres, el alemán Toni Kroos.
El mediocampista sufrió en la victoria 3-0 contra el Leganés, una fractura-avulsión de la base del quinto metatarsiano del pie derecho, lo que podría alejarlo de las canchas dos meses.
Kroos es una de las piezas vitales del esquema Zidane, tanto que en un año exactamente (desde 8/11/2015) de 36 partidos de Liga jugados ha estado en el banquillo solamente dos veces.
Si se le suma los 12 partidos que empezó en Champions durante ese periodo, serían 48. Más los otros 12 con la selección alemana da un total de 60 partidos prácticamente sin descanso para el alemán.
Zidane le había encontrado el lugar ideal con Casemiro guardándole la espalda y teniendo de socio al croata Luka Modric en el medio campo para distribuir balones a la BBC, pero las lesiones de los primeros dos obligó al francés a darle más responsabilidades al motor del equipo, se puede decir.
Kroos firmó hace un mes un renovación de contrato que lo vincula al Real Madrid hasta 2022, es decir hasta que cumpla los 32 años.
El plan de Zidane
El técnico madridista tomó un respiro gracias a la recuperación de Modric, quien entró en el partido contra el Leganés de suplente. Sin embargo, el juego del croata lo expone a lesionarse nuevamente lo que resultaría dramático para el entrenador.
Sería el momento de usar a Mateo Kovacic, un suplente que le ha funcionado a Zidane en los últimos partidos y que podría ubicarse en el puesto de pivote reservado de Casemiro (que volverá este mes).
Sin embargo, el también croata le gusta mucho salir con balón dominado lo que podría afectar a la defensa en caso de alguna pérdida de pelota. Kovacic deberá ser disciplinado y estar concentrado durante los 90 minutos en los que estará en cancha de seguro.
El otro compañero sería James Rodríguez o Isco, dos jugadores que buscan minutos en el equipo y que prácticamente están preparando su partida para el año que viene.
Allí Zidane se enfrentaría a la polémica cuando elija a algunos de los dos para terminar de armar un equipo que logre ganar encuentros. A Isco lo ha usado más que James, pero el colombiano tiene a los fanáticos y a la prensa a su favor y con esas presiones le será difícil decidir.
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