Por Iñigo Aduriz
06/11/2015
La decisión del Gobierno de cesar al exjefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), José Julio Rodríguez, de su puesto como vocal de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo por su decisión de incorporarse a las listas de Podemos ha sido considerada como un «fraude total» por parte de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), la principal organización militar española.
La vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, había anunciado este viernes durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que el Gobierno, a petición del ministro de Defensa, Pedro Morenés, había acordado «cesar en su destino» a Rodríguez «por pérdida de confianza y falta de idoneidad» para el cargo que venía ocupando como vocal de la mencionada orden «encargada de velar por la intachable conducta de los miembros de la institución y la observancia de las normas deontológicas de la profesión militar».
En opinión del Ejecutivo las declaraciones que hizo el exJEMAD el miércoles, cuando se conoció su fichaje por parte de Podemos, «entrañan un incumplimiento del deber de neutralidad política exigible a los militares y con más razón para los que como él han ostentado los más altos cargos de la carrera militar».
«A petición propia»
Poco después Podemos hacía público un comunicado recordando que Rodríguez pidió el cese al Ministerio de Defensa la semana pasada, por lo que consideraba que «el cese de este viernes es a petición propia». La formación que dirige Pablo Iglesias asegura que la solicitud de cese «surte efecto desde el momento en el que se registra, por tanto para ser candidato y hacer declaraciones políticas basta con haber solicitado dicho cese».
Desde la AUME su portavoz, Mariano Casado, ha explicado en conversación con Cambio16 que lo que tenía que haber hecho el Gobierno de forma inmediata era «resolver si se dan las circunstancias del retiro» y, en el caso de que así fuera, acordarlo. Eso haría que Rodríguez «pierda la condición de militar y deja de estar sujeto al régimen de obligaciones y de derechos». Asimismo, ha considerado «un escándalo» tanto la decisión anunciada hoy por el Ejecutivo como la fórmula utilizada para comunicarla.
Casado ha asegurado que el cargo de vocal de la Real Militar Orden de San Hermenegildo «no es un destino» como ha dicho Sáenz de Santamaría. «Hay una norma, el reglamento de la orden de San Hermenegildo, que establece que los exJEMES durante seis años permanecerán en esa orden. Pero no va todos los días ni tiene por qué ir, porque eso no es un destino», ha remarcado.
Trámite de audiencia
El representante de la organización militar ha añadido, además, que «en el hipotético caso de que se entendiera que es un destino» para poder haberle cesado el Gobierno tenía que haber dado a Rodríguez «trámite de audiencia», porque «en este país no existen sanciones morales, están sujetas al principio de legalidad». «Si quieren sancionarle tienen que facilitarle un procedimiento y darle la posibilidad de que recurra y haga alegaciones», ha concluido.
En referencia a las declaraciones realizadas por Rodríguez en los últimos días Casado ha señalado que el ser militar «no es un sacerdocio» y que por tanto los militares pueden realizar las manifestaciones que consideren oportunas siempre que no incumplan el deber de neutralidad que les exige su condición.
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