Por Cambio16
15/11/2016
«Quisimos recoger las propuestas de los colombianos para lograr un nuevo, un mejor acuerdo de paz con las FARC (…) El nuevo acuerdo, fortalecido con los aportes ciudadanos, será divulgado ampliamente a partir de mañana (lunes)» fueron las palabras del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, en su discurso este domingo tras anunciarse un nuevo acuerdo de paz firmado por los equipos negociadores del Gobierno y las FARC.
Y aquí inicia la primera interrogante. Lo pactado en La Habana tardó más de un día en ser ensamblado por parte de las delegaciones, pero el texto completo finalmente se conoció en la madrugada del lunes. ¿Urgía anunciar un nuevo acuerdo sin texto definitivo? o ¿Busca Santos firmar una paz omitiendo a los votantes del No?. Estas interrogantes son las que se plantean medios de información internacionales como The Wall Street Journal, al afirmar que el presidente de Colombia pretende asegurar un pacto con la guerrilla omitiendo las consideraciones de quienes ganaron ampliamente el plebiscito del 2 de octubre.
Este es el texto completo anunciado por el Gobierno y las FARC
Tanto Santos como el jefe del equipo negociador, Humberto de la Calle, defendieron que este nuevo acuerdo «es un mejor acuerdo». Y a pesar que de que Santos tuvo la deferencia de llamar el sábado previamente a varios voceros del «No» para informarles sobre el nuevo acuerdo, incluyendo a Álvaro Uribe Vélez, el tono predominante entre ellos fue de cautela.
“He pedido al presidente de la República que los textos que anuncian de La Habana no tengan alcance definitivo, que sean puestos en conocimiento de los voceros del ‘no’ y de las víctimas, quienes los estudiarán en breve tiempo y expondrán cualquier observación o solicitud de modificación en nueva reunión con el equipo negociador del Gobierno”, expresó Uribe tras haber sido informado del «nuevo acuerdo».“He insistido al presidente de la República en la necesidad de un acuerdo nacional sobre la paz, que incluya a las instituciones de justicia”, agregó en la declaración leída a la prensa
Aún queda pendiente la refrendación, que el Gobierno aún no define. Se están evaluando tres alternativas: un trámite legislativo, cabildos abiertos en los niveles municipal y departamental, y una nueva convocatoria a las urnas. Pero no menos importante: falta oír las respuestas de diversos sectores al conocer en detalle el nuevo acuerdo final.
Trump al panorama
La revista colombiana Semana intenta responder a parte de las interrogantes del WSJ, afirmando que una de las razones de peso para acelerar el acuerdo está en la configuración del nuevo tablero de la política internacional, con la entrada de Donald Trump en el escenario.
«Los negociadores de ambos lados tenían claro desde hace tiempo que necesitaban dejar todo sellado antes de la partida de Barack Obama de la Casa Blanca, pero esa certeza se volvió mucho más urgente con la llegada del impredecible magnate republicano. Como se sabe, Trump no habló de Colombia durante la campaña, ni se conoce su posición frente al proceso, pero su discurso de línea dura obliga a pensar que no lo verá con el mismo optimismo que el mandatario saliente» cita la publicación.
También, asegura la revista, Trump «podría ser más receptivo con las voces que no ven con buenos ojos hacer concesiones a las FARC. Basta recordar el trino que Uribe envió sobre la victoria de Trump apenas se produjo. Después de felicitarlo, le recordó que: ‘El narcoterrorismo de Colombia y la tiranía de Venezuela son los dos grandes enemigos de nuestra democracia'».
Además, es probable que la política antidrogas recupere un lugar prioritario y que el gobierno Trump se endurezca, precisamente en momentos en que los cultivos ilícitos han aumentado en Colombia.