Bankia cerró el proceso de fusión con BMN. La entidad continúa limpiando su balance, conteniendo gastos y aumentando clientes. Pero en la presentación de sus resultados Bankia asegura que estos siguen impactados por márgenes que no consiguen levantarse, dado los tipos de interés.
Controlado por el Estado con un 64% del capital, en sus resultados Bankia anunció un aumento del 39,2%, atribuible en 2018 hasta 703 millones de euros. Esto a pesar de que la limpieza del balance propició una pérdida trimestral de 40 millones de euros.
La venta a finales de diciembre de una cartera de activos tóxicos por importe de 3 mil millones de euros, restó 85 millones al resultado. En un contexto de tipos de interés ultrabajos, vio crecer ligeramente en el cuarto trimestre su principal caballo de batalla: el margen de intereses.
https://twitter.com/PressBankia/status/1089824307776114688
En sus resultados Bankia apunta que la diferencia entre lo que cobra por préstamos y paga por depósitos, les generó 2.049 millones de euros durante el año. Esto representa 9,6% menos que lo registrado contando con la fusionada BMN. Entre octubre y diciembre la magnitud alcanzó los 507 millones de euros, un 2,4% más que en el tercer trimestre. Esto en un contexto de competencia en el mercado de créditos.
En la presentación de sus resultados Bankia, cuya cartera crediticia la dominan las hipotecas, explica que trata de responder a la coyuntura. Se enfoca en el crédito al consumo y a las empresas, negocios más rentables y en lo que reporta crecimiento.
Privatización en veremos pese a mejorar la eficiencia
Bankia fue rescatada con fondos públicos por 22.400 millones de euros en 2012. Con esto se recuperó de las pérdidas de sus hipotecas en el punto más álgido de la crisis financiera española. Aplicó duros recortes de costes y mejoró sustancialmente sus activos morosos y eficiencia. Pero su cotización no acaba de despegar, dificultando la privatización.
El Gobierno español aprobó a finales de 2018 extender hasta finales de 2021 el plazo para completar la privatización. Esto con el fin de encontrar métodos y momentos más propicios en mercados que no reconocen la transformación de la entidad.
En sus resultados Bankia estima ingresos del Estado por 219 millones de euros
Bankia expone que las mejoras en la gestión le permitieron elevar un 5% el dividendo con cargo a las cuentas de 2018. Por ello el Estado ingresará 219 millones de euros destinados a devolver ayudas. Contando con los dividendos y colocaciones, el Estado recuperará en abril con dos colocaciones y dividendos por más de 3.000 millones de euros.
Los persistentes bajos tipos y sus proyecciones llevaron a Bankia a perder en 2018 más de un tercio de su valor bursátil. Su cotización ronda los 2,6 euros frente a los 4,06 a los que el FROB colocó acciones. Ocurrió hace algo más de un año, cuando vendió un 7% por 818 millones de euros.
En sus resultados Bankia reporta que a finales de 2018 redujo sus activos improductivos en 6.000 millones de euros; bajó la tasa de morosidad al 6,5% desde el 7,8% de finales de septiembre; cerró el año con un ratio de capital tier-1 fully-loaded (la medida más estricta de solvencia) del 12,5%, frente al 12,46% de septiembre, y por encima del 12% que se fijó como objetivo en su plan estratégico 2018-2020.
https://twitter.com/PressBankia/status/1089813548258258945
Goirigolzarri y Sevilla aseguran desconocer supuesta red de escuchas
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, aseguró que ni él ni el consejero delegado de la entidad, José Sevilla, conocían ni participaron en presuntas escuchas encargadas por BBVA mientras fueron directivos.
«Todo lo que se publica en los medios representa una sorpresa para nosotros. No conocimos ni participamos en nada de lo que se refleja en los medios «. Así respondió cuando se le inquirió sobre el escándalo de presuntas escuchas que investiga BBVA.
#Goirigolzarri: #Nunca supimos nada ni participamos en las escuchas de #BBVA https://t.co/wft3slhtAi
— eESeguridad (@eESeguridad) January 28, 2019
La supuesta actividad, indagada también por la Audiencia Nacional y sobre la que el BCE muestra preocupación, se habría realizado entre 2004 y 2005, en el marco de un frustrado asalto al accionariado del banco por parte de la constructora Sacyr.
Entonces Goirigolzarri era consejero delegado de BBVA y Sevilla. Fue responsable de la presidencia ocupada por Francisco González, hasta finales del año pasado presidente de la entidad y ahora presidente de honor.
«Nunca sospeché que alguien me estuviera grabando ni lo sospecho ahora», dijo tras presentarse los resultados anuales.
Lea también: Financiación hipotecaria de Bankia fue de 1.880 millones de euros