Keith Raniere, el cerebro detrás del supuesto grupo de «autoayuda» NXIVM, que utilizó para reclutar y preparar mujeres para la explotación sexual, fue condenado a 120 años de prisión, informó la Oficina del Fiscal para el Distrito Este de Nueva York. La decisión marca un punto de inflexión en un caso que ha salpicado el mundo de la televisión, la política y la industria.
La realidad ha sido más creativa que los mejores y más truculentos guionistas. La trama real implica a una famosa actriz de televisión, a la hija de otra, a la heredera de un imperio licorero y al hijo de un expresidente mexicano.
Los detalles de este entramado se exponen en El juramento (The Vow) una serie documental que HBO estrenó el 24 de septiembre. La cadena ha dejado entrever la posibilidad de una segunda temporada. Un anuncio que da fe de lo llamativa que es la serie. Sin embargo, es un pálido reflejo de las intrigas que, en la vida real, envuelven el caso.
La sentencia de Keith Raniere, dictada por el juez Nicholas Garaufis, llega más de un año después de que el líder de NXIVM fue condenado, tras un juicio de seis semanas. En junio de 2019, un jurado lo declaró culpable de los siete cargos penales, que incluían crimen organizado, tráfico sexual, trabajo forzoso, obstrucción de la justicia y pornografía infantil.
La fachada de NXIVM
Con sede en Albany, Nueva York, y creado en 1998, NXIVM -que se pronuncia «nexium»- se describe como una «comunidad guiada por principios humanitarios que persigue empoderar a las personas».
El lema de la organización es «trabajar para construir un mundo mejor». Dice que su personal superar las 16.000 personas y opera en Estados Unidos, Canadá, México y América Central.
En realidad, Keith Raniere se construyó una pirámide de poder y dinero y operó en la parte superior. Desde allí controló el grupo a través de un sistema de esclavos y amo. Algunas mujeres fueron marcadas en sus áreas pélvicas con las iniciales de Raniere en ceremonias filmadas. Mientras, los miembros se reunían cada año para celebrar su cumpleaños en un evento denominado «Semana de la Vanguardia».
Caída en desgracia
La caída de Raniere, y el posterior colapso de NXIVM, se remonta a octubre de 2017, cuando el diario New York Times publicó una inquietante investigación de un «culto sexual» jerárquico dentro de NXIVM, en el que las «esclavas sexuales» eran sometidas a humillaciones rituales, marcadas con las iniciales de Raniere y explotadas para el sexo. Las autoridades policiales comenzaron a investigar al grupo después de la publicación del reportaje.
En marzo de 2018, Raniere fue arrestado. También cinco mujeres vinculadas a NXIVM, que se declararon culpables de los cargos de crimen organizado que les imputaron.
El quinteto incluye a la heredera del imperio licorero Seagram, Clare Bronfman, de 40 años de edad. Se le acusó de utilizar más de 100 millones de dólares (unos 85 millones de euros) de su inmensa riqueza para financiar las actividades de NXIVM. Se declaró culpable de dos cargos: conspiración para ocultar y albergar inmigrantes ilegales con fines de lucro y uso fraudulento de identificación. Le dijo a la corte en Brooklyn que estaba «realmente arrepentida». Fue sentenciada a seis años y nueve meses de prisión.
La membresía del culto incluía actrices, herederas y figuras vinculadas a la política, algunos de los cuales testificaron contra Raniere en el juicio.
Desgarradores testimonios
Antes de la sentencia, un total de 15 personas subieron al estrado y compartieron testimonios desgarradores sobre los abusos que sufrieron a manos del supuesto «gurú» de la autoayuda. Muchos de ellos eran antiguos «esclavos sexuales» en el culto «DOS», que es la abreviatura de Dominant over Submissive (Dominante sobre sumiso).
Una ex miembro testificó que se le «preparó» durante semanas antes de cumplir los 18 años para que Keith Raniere pudiera «tomar su virginidad«. En la corte se le identificó solo como Camila. Le dijo al tribunal que tuvo una relación de 12 años con Raniere que comenzó cuando ella tenía 15 y él 45. Declaró que la obligó a estar disponible para tener relaciones sexuales cada vez que él quisiera ser «complacido» y que la forzó a bajar su peso a menos de 100 libras (unos 45 kilos).
Relató que a ella y a una de sus hermanas, que era menor de edad, se les obligó a tener relaciones sexuales con Raniere en varias ocasiones. Ambas fueron embarazadas por el fundador de NXIVM y se les forzó a abortar. «Quiero seguir adelante, pero él me ha dañado de muchas maneras», contó Camila.
Los testimonios se prolongaron durante horas. En el estrado también declaró India Oxenberg. La hija de Catherine Oxenberg, actriz de la serie Dinastía, y nieta de Isabel de Yugoslavia.
India, que ahora tiene 29 años de edad, contó cómo se le «sedujo» para ingresar en NXIVM. La encargada de reclutarla en 2011 fue la actriz Allison Mack, una de las coprotagonistas de la serie de TV Smallville. India Oxenberg dijo «Raniere es un depredador sexual, me violó». Los testimonios de India Oxenberg son parte importante de la serie «El juramento», de HBO.
Intentos de la defensa
Los abogados de Raniere argumentaron durante mucho tiempo que los actos sexuales en los que participaron sus clientes fueron consensuados. Aseguran que no se puede hablar de «víctimas», ya que se habían unido a NXIVM por su propia voluntad.
Muchas personas se sintieron atraídas por NXIVM. Tenían la esperanza de que la organización las ayudara a superar sus inseguridades. A las mujeres las reclutaron para formar parte del culto «DOS«, en un departamento dirigido por la actriz Allison Mack. Luego se les pidió que entregaran fotografías comprometedoras e información sobre ellos mismos. Raniere y Mack usarían esos elementos para chantajearlos.
En abril, Mack se declaró culpable, ante el tribunal federal de Brooklyn de los cargos de asociación ilícita relacionados con NXIVM. En un comunicado admitió haber reclutado mujeres diciéndoles que se unían a un grupo de tutoras. «Asumo toda la responsabilidad de mi conducta», dijo. La actriz germano-estadounidense era la mano derecha de Ranieri. Se le concedió la libertad bajo fianza por cinco millones de dólares.
Otro nombre prominente vinculado a NXIVM es Emiliano Salinas Occelli, que dirigió la filial de la agrupación en México, bajo el esquema de los Programas de Éxito Ejecutivo. El hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari mantuvo esa responsabilidad hasta la detención de Keith Raniere, en 2018. De este caso se publica muy poco -casi nada- en la prensa mexicana.
Keith Raniere sin señales de arrepentimiento
En los meses anteriores a la sentencia, los fiscales federales dijeron que Raniere dio muestras de ser «impenitente», sin absolutamente ninguna «empatía por sus víctimas». El acusado no ha cuestionado esta caracterización, más bien la ha abrazado.
«No se arrepiente de su conducta ni de sus elecciones», escribieron sus abogados en un expediente judicial el mes pasado. Agregaron que «tiene la intención de luchar este caso con todas sus fuerzas, confiando en que algún día se le reivindique».
En un intento por anular su condena, Keith Raniere ha intentado crear un podcast dedicado a su caso. También se propuso realizar un concurso, con un premio en efectivo de 25.000 dólares, para encontrar errores en su enjuiciamiento.
Keith Raniere nunca subió al estrado durante el caso el año pasado. Fue el único miembro del liderazgo de NXIVM en enfrentar un juicio. Otros implicados en esta trama -como Allison Mack y Clare Bronfman– aceptaron acuerdos con la Fiscalía.
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