El Servicio Postal de Estados Unidos (USPS) adquirirá una flota de 148.000 furgonetas de gasolina para el reparto del correo a pesar de las solicitudes de la EPA y del gobierno de Biden de impulsar la energía limpia y electrificar sus vehículos del gobierno federal
El Servicio Postal modernizará la flota más grande y antigua del gobierno federal con vehículos de combustión interna. El director general del Servicio Postal, Louis DeJoy, hizo caso omiso de las peticiones tanto del Consejo de Calidad Ambiental como de la Agencia de Protección Ambiental en orientar la compra a coches eléctricos.
USPS espera sustituir la flota de entrega con un 90% de furgonetas de gasolina y un 10% de vehículos eléctricos, a un costo de hasta $ 11.300 millones. El contrato, orquestado por DeJoy, ofrece solo una mejora en la economía de combustible de 0,4 mpg con respecto a la flota actual de la agencia.
La decisión es un gran golpe para la Casa Blanca. El presidente Biden se comprometió a hacer la transición de la flota federal a energía limpia. Excepto del Ejército, el Servicio Postal tiene más vehículos que cualquier otra agencia gubernamental. Representa casi un tercio de los automóviles y furgonetas de propiedad federal.
Los funcionarios de la EPA dijeron que el Servicio Postal subestimó enormemente las emisiones de su flota de «vehículos de entrega de próxima generación», y acusan a la agencia de correos de falsificar las matemáticas en su análisis para justificar la compra masiva de furgonetas con motor de combustión interna, reseñó The Washington Post.
Servicio Postal de EE UU renovará su flota
El Servicio Postal de EE UU dio una versión sobre la compra de 148.000 vehículos de combustión que denomina de última generación. Asegura que “cumplió con sus obligaciones en virtud del proceso de la Ley Nacional de Política Ambiental (NEPA) y que evaluó los impactos ambientales del programa. «Un cambio fiscal y ambiental responsable para modernizar la flota más grande y antigua del gobierno federal», apuntó. Asimismo indicó que su “compromiso con una flota eléctrica sigue siendo ambiciosa. «A medida que nuestra posición financiera mejore con la aplicación del plan Delivering for America, iremos adquiriendo de coches eléctricos adicionales”, dijo DeJoy.
Consideró que después de una revisión y un estudio exhaustivos, “determinamos que la solicitud de la EPA de una audiencia pública no es legalmente requerida”.
Datos erróneos sobre las emisiones
Los expertos ambientales y de la industria automotriz argumentan que las entregas intermitentes de la agencia a 161 millones de direcciones 6 días a la semana brindan un escenario ideal para el uso de vehículos eléctricos.
Pero DeJoy, un remanente de la gestión de Trump, tiene otra percepción. Cuando calificó la inversión en el transporte ecológico como “ambiciosa”, en una reunión pública de la junta directiva del Servicio Postal, sus comentarios fueron recibidos con risas entre la audiencia.
Uno de los aspectos más controvertidos de la operación de compra es que se adelantan los trámites sin contar con el aval ambiental. Antes de que una agencia federal gaste miles de millones de dólares, se supone que debe completar un “estudio de impacto ambiental”. Esto es, un análisis exhaustivo de la seguridad del transporte, el ruido del tráfico y los efectos ambientales de su compra propuesta.
Sin embargo, el Servicio Postal anunció su acuerdo para comprar los furgonetas en febrero de 2021 antes de comenzar un análisis ambiental. Y pagó 482 millones de dólares a Oshkosh para comenzar a construir instalaciones de fabricación antes de que se completara el estudio.
Los funcionarios del gobierno de Biden acusaron al Servicio Postal de justificar su decisión con un estudio ambiental que se basó en datos erróneos sobre las emisiones de gases de efecto invernadero, el costo del combustible y el costo de los vehículos eléctricos.
“Cuando salió a la luz”, dijo Adrián Martínez, abogado principal de Earthjustice, “nos dimos cuenta de que estaban mirando las cosas equivocadas o que estaban totalmente mal informados. Y es enormemente problemático”.
La agencia infló el costo de los coches eléctricos
Detrás de la decisión del Servicio Postal de comprar una flota, en su mayoría a gasolina, está su afirmación de que no puede pagar los vehículos eléctricos. En su análisis ambiental, la agencia estimó que adquirir coches eléctricos costaría más de 30.000 dólares más por vehículo que la alternativa a gasolina. Un número que ha confundido a los reguladores y defensores del medio ambiente, quienes dicen que la cifra no coincide con las estimaciones de costos independientes.
De acuerdo con la EPA, el correo usó precios de gasolina inexactos hacen suponer que un camión a gasolina pareciera comparativamente barato. La agencia proyectó los costos de la gasolina en $2,19 por galón y estimó que aumentarían a alrededor de $2,55 por galón para 2040. Pero cuando el Servicio Postal elaboraba su análisis, los precios promedio de la gasolina ya habían superado los $2,80 por galón.
La EPA también descubrió que después de subestimar el costo de poseer furgonetas que funcionan con gasolina, la agencia de correo infló el costo de los vehículos eléctricos. Al no considerar la caída de los precios de las baterías, que gradualmente hacen que los vehículos eléctricos sean más asequibles. El resultado fue que los furgonetas que queman gasolina parecían una mejor oferta. Pero la mayoría de los números estaban equivocados.
Los furgonetas del Servicio Postal consumen mucha gasolina, con un promedio de solo 8,2 mpg. Pero se construyeron hace un promedio de 30 años y los camiones se han vuelto más eficientes desde entonces. Los expertos dicen que el estándar de la industria para los vehículos de reparto a gasolina en la actualidad es de 12 a 14 mpg.
¿Problema financiero?
Louis DeJoy afirmó que el Servicio Postal no puede pagar una flota de furgonetas más eficientes en combustible dada su precaria situación financiera; sin embargo el correo ahora cuenta con su mejor perspectiva financiera en años. Tenía $ 22.300 millones en efectivo a fines de 2021, casi el doble del costo estimado de gama alta de sus nuevas furgonetas.
Además, el Congreso está a punto de aprobar una revisión importante de las finanzas del Servicio Postal, eliminando $57.000 millones en pasivos existentes. Más $50.000 millones adicionales en gastos futuros durante la próxima década. La legislación fue aprobada por la Cámara de Representantes y podría obtener la aprobación. Tiene 14 copatrocinadores republicanos, que es apoyo suficiente para derrotar a un obstruccionista potencial.
Algunos miembros del Congreso han instado a DeJoy a utilizar la flexibilidad financiera que ofrece el proyecto de ley para invertir en la infraestructura del Servicio Postal. Junto con las furgonetas de reparto, la agencia necesita nuevos equipos de clasificación y renovaciones en sus plantas y vestíbulos de oficinas.
“Tienes unos 23.000 millones de dólares en efectivo”, señaló Paul Steidler, que estudia el Servicio Postal en el Instituto libertario Lexington, a la junta directiva del correo este mes. “Se proyecta que alcance el punto de equilibrio para 2023. Si necesita más fondos, recuerde que, por ley, se supone que debe autofinanciarse”.
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