Por Rafael García-Rico
11/02/2017
Razón o ciencia y fe. El debate es casi tan antiguo como la propia humanidad, aunque cobró especial fuerza durante el Renacimiento. A principios de 1320, en la ciudad de Mantua se había planteado una controversia pública sobre la posición de los elementos agua y tierra. La discusión se repitió el 20 de enero en Verona, en la iglesia de Santa Elena. Las intenciones de la Iglesia no eran otras que las de adecuar la doctrina aristotélica a los principios teológicos de la creación. Las obras del filósofo griego, traducidas al latín, se hacían un hueco en los anaqueles de las librerías de pensadores y filósofos del Treccento.
Dante quiso fijar por escrito su posición en relación con este tema y escribió Quaestio de aqua et terra, donde plantea que las esferas del agua y la tierra no son concéntricas, tal como se afirmaba en su época. Tampoco faltó la ironía en el epílogo de su obra, donde glosaba las ausencias en tan significativos debates. Este opúsculo resultó su última creación literaria y su primer texto científico. Pocos meses después de ver la luz, el poeta y filósofo considerado el padre de la poesía italiana y precursor del Renacimiento murió.
La Fundación Aquae inicia un proyecto editorial con obras escritas por autores y pensadores clásicos bajo el nombre “Clásicos Aquae”. El primer número de la colección es precisamente Quaestio de Aqua et Terra, una obra inédita en castellano del autor de La Divina Comedia, Dante Alighieri, acompañada por un pequeño opúsculo hagiográfico escrito por su coetáneo Giovanni Boccaccio, Trattatello in Lode di Dante Alighieri, uno de sus más firmes admiradores y aquel que bautizó a La Comedia del autor de Florencia como La Divina Comedia.
Esta importante obra de pensamiento es el primer título de la colección “Clásicos Aquae” de la Fundación Aquae. La colección ofrecerá una atención destacada a las obras que sobre el agua se han escrito a lo largo de la historia. El reto es ambicioso, resaltar la importancia que tiene el agua en nuestro mundo diario y en los grandes desafíos de la ciencia y el pensamiento.
Como subraya Ángel Simón, presidente de la Fundación Aquae, en la introducción al texto de Dante, “el agua representa para el ser humano la posibilidad de vivir, asegura su existencia, la ennoblece y la perpetúa… es un elemento fundamental de la cultura y el ser humano, entre la admiración y la devoción, entre el análisis científico y técnico, nunca abandona, desde sus capacidades, el estudio del agua, su representación y evocación”.
El acto de presentación de esta colección, introducido por la cofundadora y directora de la revista Granta en español, Valerie Miles, tuvo lugar en el Círculo de Bellas Artes de Madrid y contó también con la presencia del presidente de la Fundación Aquae, Ángel Simón; Julia Benavent, traductora y editora de la obra de Dante, y el catedrático de Astrofísica de la Universitat de Valencia Vicent Martínez. La colección se completará con títulos de otros dos pensadores y escritores clásicos, como Galileo Galilei y Leornardo da Vinci.