Por Cambio16
28/04/2017
El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha acordado este viernes la apertura de juicio oral por delitos de estafa agravada, blanqueo de capitales, alzamiento de bienes y contra la hacienda pública contra seis hijos del fallecido empresario José María Ruiz-Mateos, Ángel de Cabo y otras ocho personas por el denominado caso Nueva Rumasa. Además, ha señalado a 57 empresas como responsables civiles subsidiarias y a nueve personas en calidad de partícipes a título lucrativo.
Según han informado fuentes judiciales a través de una nota, el magistrado impone una fianza a Álvaro, Zoilo, José María, Pablo, Francisco Javier y Alfonso Ruiz-Mateos de más de 496 millones de euros, de los cuales 200 millones corresponden a la multa y 171 a la responsabilidad civil, más el tercio que establece la ley (124 millones), fianza a la que deberán hacer frente de forma conjunta y solidaria.
En el auto, el juez describe todas las prácticas irregulares ideadas por los acusados, responsables de un Grupo empresarial, Nueva Rumasa, que en 2008 ya atravesaba una difícil situación económica y que se agravó en 2009. El magistrado detalla la forma en que simulaban movimientos de efectivo, que en realidad eran traspasos entre cuentas del Grupo. Cómo realizaban “operaciones fuelle” con sociedades pantalla, para generar créditos ficticios como forma de obtener liquidez a corto plazo. También el juez relata la forma en que usaban testaferros, en sociedades formalmente ajenas, unas prácticas que agravaron la situación económica de las empresas del Grupo, cuyas deudas acumuladas en 2009 alcanzaban los 577 millones de euros.
Ante esta situación de insolvencia y la imposibilidad de recurrir a mayor financiación bancaria, señala de la Mata, los responsables del Nueva Rumasa urdieron una trama consistente en la captación de inversores. La investigación ha acreditado que entre 2009 y 2011 los fondos captados a los inversores, que constituyeron la única financiación del Grupo, “no se destinaban ni a los que se publicitaba ni a la propia sociedad emisora, sino que servían para atender deudas de otras sociedades del grupo o para adquirir otras sociedades de renombre para seguir consolidando el engaño de la garantía generalizada”.
El magistrado relata también la operativa de ocultación del patrimonio que los acusados desarrollaron a partir de 2011, ante las numerosas obligaciones de pago que tenían que afrontar, así como las declaraciones de concurso voluntario de las principales empresas del Grupo.
En esta investigación presentaron denuncia 1.409 perjudicados por el Grupo Nueva Rumasa, que reclaman 171 millones de euros. A la vista de las eventuales multas y responsabilidades civiles que pudieran imponerse a cada acusado, el juez fija en 496 millones de euros las cantidades a depositar por los acusados principales, los 6 hijos de José María Ruiz Mateos, e individualiza las cantidades que tienen que entregar cada uno de ellos. El juez señala a 57 empresas del Grupo como responsables civiles subsidiarias y 9 partícipes lucrativos, entre ellos, Joaquín Yvancos, el que fuera el abogado de José María Ruiz-Mateos.