Por Iñigo Aduriz
25/04/2017
«Gracias Nacho. Un fuerte abrazo. Ojalá se cierren pronto los líos«. Ese fue el mensaje que le envió el pasado mes de noviembre, justo un día antes de tomar posesión como ministro, Rafael Catalá a Ignacio González, que entonces ya estaba siendo investigado en el marco de la Operación Lezo que aborda la presunta financiación ilegal del PP de Madrid y que ha hecho que el juez haya decretado su ingreso en prisión.
Nada más conocerse el contenido del mensaje, revelado por La Sexta, el ministro se ha apresurado a desmentir que el SMS tuviera nada que ver con su conocimiento de la investigación que se le estaba realizando al expresidente de la Comunidad de Madrid. Pero la oposición no le cree y se ha lanzado en la tarde de este martes a exigir su dimisión.
El PSOE ha aprovechado la celebración de la sesión de control al Gobierno celebrada en el Senado para exigir responsabilidades políticas a Rafael Catalá. En boca del senador Tontxu Rodríguez, los socialistas han exigido al titular de Justicia directamente que se marche. «Váyase, señor Catalá», le ha dicho
«Usted hoy debe dimitir, se lo pide el Partido Socialista», ha insistido, antes de hacer también extensible la petición de cese para el fiscal general del Estado y el fiscal Anticorrupción. A juicio de los socialistas, todos ellos «están descomponiendo la política y la justicia».
No obstante, ha reconocido que esos altos cargos «cumplen las órdenes de su jefe, el que hoy está en Sao Paulo», en alusión al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. «¿Se acuerdan de lo que le dijo a Bárcenas? ‘Luis, nada es fácil pero hacemos lo que podemos’. Pues eso es lo que están haciendo, lo que pueden para quebrar la línea de la decencia y la honradez», ha lamentado.
El portavoz del PSOE en Justicia ha recalcado que «en cualquier país civilizado esto sería un tremendo escándalo. Un partido del Gobierno corrupto, tal y como lo dice la policía, la fiscalía y los jueces. Un partido que nombra fiscales afines. Un partido que intenta sabotear registros. Un partido que está prostituyendo las instituciones del Estado. Un partido que abusa de la justicia y un Ministro de Justicia que manda mensajes encantadores diciendo: Nacho, ojalá se cierren pronto los líos».