En el Día de la Salud de la Cumbre del Clima (COP28) paradójicamente una densa bruma insalubre cubría en la majestuosa ciudad de Dubai. Después de dos días de intensa actividad política, con la presencia de cientos de líderes mundiales en Dubái, el evento anual más importante sobre el clima vuelve a su relativa normalidad. Con decenas de eventos paralelos, mesas redondas, presentaciones y charlas y la aprobación cientos millones de dólares para diferentes programas ambientales en sus múltiples foros.
Tras los discursos de docenas de presidentes, primeros ministros, monarcas y otros líderes, la atención se centra ahora en las duras negociaciones de los próximos nueve días para buscar más acuerdos sobre cómo limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius desde la era preindustrial.
La tercera jornada de la Cumbre Climática de la ONU, COP28, se centró en los efectos del cambio climático sobre la salud humana. Bajo una bruma parda que envolvía Dubái, la cumbre dejó atrás dos días de retórica grandilocuente y peticiones de unidad de líderes mundiales para pasar a cuestiones de salud. También fue el día en el que las protestas comenzaron en serio. Precisamente con un grupo simulando reanimar una Tierra enferma, para destacar la urgencia de la crisis climática.
Día de la salud
A la primera reunión ministerial sobre clima y salud asistieron ministros de sanidad y delegaciones sanitarias de más de 100 países. Es la primera vez que un acto similar se produce en una COP. El director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, destacó que las amenazas a la salud derivadas del cambio climático eran “inmediatas y presentes”. Afirmó que “la salud es el motivo más convincente para tomar acciones climáticas”.
“Aunque la crisis climática es una crisis de salud, es un gran retraso que hayan pasado 27 COPs sin una conversación seria sobre salud. Sin duda, la salud es el motivo más convincente para tomar acciones climáticas”.
Tedros Adhanom Ghebreyesus/ Director General OMS
La reunión de la tercera jornada estuvo precedida por la Declaración de Clima y Salud de la COP28 del 2 de diciembre. Que contó con el respaldo de 123 países y recalcó el lazo entre la salud y el cambio climático. No mencionó el abandono de los combustibles fósiles que calientan el planeta, pero prometió respaldar los esfuerzos de limitar la contaminación del sector de la salud, que supone el 5% de las emisiones globales, según el jefe de la OMS.
El secretario general de la ONU, António Guterres, criticó que la promesa de emisiones netas excluía el consumo de combustibles fósiles, que produce la inmensa mayoría de los gases de efecto invernadero que expulsa el sector. Dijo que el anuncio no aclaraba cómo piensan alcanze sus objetivos las empresas.
John Kerry, el enviado climático de Estados Unidos, dijo que le resultaba “increíble” que hubiera tomado tanto tiempo convertir la salud en un tema central de la conversación climática. “Nuestros cuerpos son ecosistemas y el mundo es un ecosistema”, dijo Kerry. “Si envenenan nuestra tierra y envenenan nuestra agua y envenenan nuestro aire, envenenan nuestros cuerpos”.
Aire irrespirable e insalubre en Dubái
El cielo de Dubai fue un buen ejemplo de los problemas que el cambio climático acarrean a la salud. Dubái, debido a su ubicación, a menudo enfrenta niveles más altos de contaminación del aire que otros lugares de la Tierra. La ciudad se encuentra en la costa del golfo Pérsico, pero tierra adentro comienza un enorme desierto que abarca un tercio de la península Arábiga. La expansión de la ciudad, con su rápido crecimiento, zonas industriales y polución de los automóviles, ha sumado más factores al efecto de la arena y las partículas que empujan los vientos del desierto.
En la jornada dominical horizonte de Dubái quedó oscurecido por una capa contaminante calificada de “insalubre”. El índice de concentración de partículas alcanzó los 155 microgramos por m3, según WAQI.info, un sitio internet local que sirve para mantenerse informado en tiempo real sobre el nivel de contaminación. Esta contaminación, conocida como índice PM2.5, es considerada dañina porque puede penetrar en la sangre.
La COP28 se lleva a cabo aproximadamente a 11 km del complejo energético y de desalinización de agua de mar Jebel Ali, que alberga la central eléctrica alimentada por gas más grande del mundo. También se encuentran cerca otras dos infraestructuras contaminantes, el puerto de Jebel Ali y el aeropuerto internacional Al Maktoum, mientras que a 200 kilómetros al oeste se encuentra el campo petrolífero Bab de Abu Dabi.
Triplicar energía nuclear
El mal clima no detuvo la congestionada agenda del día. Como una estrategia para reducir la dependencia de los combustibles fósiles como el carbón y el gas, más de 20 países en la COP28 propusieron un aumento significativo en el uso de la energía nuclear. Entre ellos Estados Unidos, Francia y Japón. Su objetivo es triplicar la capacidad de energía nuclear mundial para 2050, en comparación con los niveles de 2020. El presidente francés, Emmanuel Macron, defendió esta propuesta como una parte esencial de las transiciones ecológicas de los países en desarrollo. Especialmente a través del uso de pequeños reactores modulares.
Macron subrayó que los países que se comprometen con la energía nuclear trabajarán con el OIEA para desarrollar un marco regulatorio que ayude a los países a desplegarla de manera segura y confiable. También hizo hincapié en la necesidad de que el Banco Mundial ayude a financiarlo.
“Este compromiso y el objetivo de triplicar la capacidad nuclear envía una poderosa señal al mundo. La energía nuclear ha vuelto y es una solución indispensable para la lucha contra el cambio climático”.
Emmanuel Macron/ Presidente de Francia
También Estados Unidos está con la nuclear
John Kerry, el enviado de Estados Unidos para el clima, respaldó este enfoque. Declaró que “la realidad de los hechos y la evidencia nos dicen que no se puede llegar al cero neto en 2050 sin algo de energía nuclear”. Añadió que “no estamos argumentando que esta vaya a ser absolutamente una alternativa radical a cualquier otra fuente de energía”. “No hay ideología detrás de esto”, apuntó.
Este enfoque ha sido criticado por grupos ambientalistas. Señalan los problemas de seguridad y la difícil eliminación de los desechos asociados con la energía nuclear. Y que triplicar la capacidad instalada de energía nuclear de aquí a 2050 era un objetivo que el gobierno demócrata de Joe Biden tenía dificultades para ocultar.
«Si bien apreciamos que el gobierno de (Joe) Biden está buscando invertir en alternativas a los combustibles fósiles, no tenemos tiempo que perder en distracciones peligrosas como la energía nuclear”.
Jeff Ordower, director para América del Norte del grupo ambientalista 350.org.
Unidad global por bosques y océano
El Presidente Lula da Silva y Sultán Al Jaber anunciaron una asociación de dos años para movilizar nuevos recursos y apoyo político para la naturaleza en el camino hacia la COP30 en Belém. Durante la Cumbre Mundial sobre Acción Climática, la Presidencia de la COP28 y sus socios presentaron una serie de iniciativas nuevas y ambiciosas para cumplir simultáneamente los objetivos climáticos y de biodiversidad. Se comprometieron a un financiamiento inicial de 1.700 millones de dólares para cumplir simultáneamente los objetivos climáticos y de biodiversidad.
Los recursos aprobados
- SE Razan Al Mubarak, Campeón de Alto Nivel de la ONU sobre Cambio Climático para la COP28, anunció que los Emiratos Árabes Unidos contribuirían con 100 millones de dólares de nueva financiación para proyectos de naturaleza y clima, con una inversión inicial de 30 millones de dólares en el plan ‘Ghana Resiliente’ del gobierno de Ghana.
- Francia confirmó la financiación de tres paquetes de financiación forestal, incluyendo 100 millones de dólares para Papúa Nueva Guinea, 60 millones de dólares para la República Democrática del Congo y 50 millones de dólares para la República del Congo.
- Indonesia y Noruega destacaron una asociación de 100 millones de dólares en apoyo del plan pionero FOLU Net Sink 2030 de Indonesia.
- Tonga anunció una financiación de 100 millones de dólares para los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo del Pacífico (P-SIDS) del Fondo para la Tierra Bezos para proteger al 30 por ciento de las aguas y zonas económicas exclusivas de los países para 2030.
- Un grupo de organizaciones filantrópicas, incluyendo Bloomberg Philanthropies, Builders Vision y Oceankind, anunciaron 250 millones de dólares de nueva financiación en el marco de la Ocean Resilience Climate Alliance (ORCA).
- El Banco Asiático de Desarrollo y varios socios anunciaron el Nature Finance Hub, una iniciativa que busca movilizar 1.000 millones de dólares para el desarrollo, con la meta de atraer otros 2.000 millones de dólares en capital financiero privado adicional para 2030 en proyectos climáticos centrados en la naturaleza.
Millones para reducir emisiones de metano
La Cumbre Mundial sobre Acción Climática, COP28, logró una victoria temprana. La promesa de al menos 260 millones de dólares de las naciones ricas para iniciar el fondo de ayuda a los países más vulnerables a enfrentar condiciones climáticas extremas. Emiratos Árabes Unidos anunció que contribuirá con 100 millones de dólares. Irán a un fondo del Banco Mundial para donaciones destinadas a estimular la reducción de metano por parte de las compañías petroleras nacionales en los países en desarrollo.
El enviado de Estados Unidos para el clima, John Kerry, se unió al coro. Informó que se han recaudado más de 1.000 millones de dólares para ayudar a reducir el metano desde la COP27. La UE se comprometió a destinar 175 millones de euros para frenar el metano a escala mundial. En particular ayudando al Observatorio Internacional de Emisiones de Mathane a recopilar datos.
Además, varias empresas, incluyendo Equinor, Total, BP, Shell, Eni y Occidental Petroleum, prometieron 25 millones de dólares cada una. Para ayudar en el esfuerzo y proporcionar asistencia técnica. El presidente de la COP28, Sultan Al Jaber, no se quedó atrás. Dijo que su país contribuiría con 100 millones de dólares a un fondo del Banco Mundial para ayudar a reducir las emisiones de metano. También pidió objetivos nacionales más fuertes en toda la economía para reducir las emisiones.
Recursos para la transición
En la jornada dominical de la Cumbre del Clima también se anunciaron compromisos financieros significativos para apoyar la transición global hacia la energía renovable. La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, subrayó la urgencia de este momento. Dijo que su país proporcionará financiamiento concesional para ayudar a construir cadenas de suministro de energía limpia a nivel mundial.
La Unión Europea se comprometió a invertir 2.300 millones de euros en los próximos dos años para apoyar la transición energética en los países vecinos y en todo el mundo. El compromiso fue elogiado por más de 110 países que se han comprometido a triplicar las energías renovables y duplicar la eficiencia energética para finales de la década.
El Banco Europeo de Inversiones también se unió a este esfuerzo. Anunció planes para desbloquear 5.000 millones de euros de garantías para respaldar al sector eólico de la UE. El financiamiento se desbloqueará en tramos, comenzando con 1.500 millones de euros antes de fin de año. Los Emiratos Árabes Unidos también se comprometieron a contribuir con 100 millones de dólares a un fondo del Banco Mundial. Para donaciones destinadas a estimular el trabajo de metano por parte de las compañías petroleras nacionales en los países en desarrollo.
Duras negociaciones
A pesar de estos compromisos, los escépticos aún esperan un plan concreto que conduzca al abandono de las energías fósiles y a la descarbonización. La COP28 ha entrado en una fase crucial de negociaciones y debates. Aunque se han logrado algunos compromisos, aún queda mucho por hacer y concretar.
La urgencia de la crisis climática requiere acciones concretas y significativas. El mundo estará observando de cerca cómo se desarrollan las cosas en los próximos días. La urgencia de este momento es clara, como dijo la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris: “El reloj ya no solo está corriendo, está golpeando. Hay que recuperar el tiempo perdido”. Mientras una sombra de duda envuelve la COP28, tan densa como la bruma parda que el domingo cubrió Dubái.
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