Francisco Sánchez-Matamoros, analista de XTB
EI Ibex35 cierra con una caída cercana al 3% en una semana marcada por la volatilidad en las bolsas. En la sesión del jueves, el selectivo español parecía evitar las presiones bajistas procedentes de EEUU y Asia. Pero el viernes volvió a a la realidad de las caídas a lo largo de la sesión de cierre semanal. Dicho rebote principalmente vino potenciado por el sector bancario, en un movimiento más técnico que fundamental. Finalmente, la bolsa española giró al rojo, perdiendo el nivel de los 8.700 puntos. El índice español se sitúa actualmente en mínimos de 2016, por lo que conformaría la cuarta de las últimas 5 semanas a la baja.
Volatilidad en las bolsas
Bankinter inauguró la presentación de resultados por parte del sector bancario, anunciando unos ingresos de 404 millones hasta septiembre. Esta lectura supone un 7,3% más, mientras que el mercado descontaba unas ganancias del 6,1%. Le siguieron Caixabank y Sabadell. Caixabank ha publicado un beneficio de 1.768 millones de euros, un 18,8% más. En el lado opuesto Sabadell ha anunciado unas ganancias de 247,8 millones de euros, un 56% menos, debido a ajustes y provisiones.
Por lo que podemos proyectar, seguramente presenciemos referencias mixtas en lo que nos queda de presentación de resultados. Otras de las referencias ha sido IAG, la aerolínea ha anunciado una mejora de su beneficio del 7,3%. Por su parte Viscofan, compañía poco habituada a sobresaltos en bolsa, ha sufrido una de las mayores caídas de su historia, hasta un 23%. La rebaja de las previsiones y los malos resultados presentados por parte de la empresa de envolturas cárnicas se desploma en el parqué. Acerinox, a pesar de anunciar un aumento del 40% de su beneficio, sufre en su cotización. Sobre todo debido a la advertencia de un freno en su negocio para el último trimestre de año y la caída del precio de las materias primas.
Desaceleración global
El Ibex35 sigue la tónica bajista que está azotando a las bolsas debido a los temores de una posible desaceleración económica mundial. Continúan los mismos factores negativos presentes en el mercado. Tanto guerra comercial, tensiones presupuestarias en Italia como el encarecimiento del dinero por las subidas de tipos en EEUU. Estos factores pueden estrechar los márgenes de cara a las próximas presentaciones de resultados. Los gigantes tecnológicos Amazon y Alphabet decepcionaron en su presentación de sus cuentas. El dato de PIB trimestral americano de 3.5% es mejor del que esperaban los inversores.
El selectivo español, por debajo de la cota de los 8.700 puntos, cotiza en niveles que no veíamos desde 2016. Marcamos como muy relevante para la evolución del índice en el medio plazo su soporte de los 8.500 puntos. De perder este nivel se quedaría sin referencias hasta los 7.500 puntos. Sin embargo, pensamos que las caídas debieran encontrar freno en estos niveles. El rango de cotización debe situarse en la horquilla de los 8.500 y los 8.800 puntos con un incremento de la volatilidad. Observamos que la incertidumbre reinante en las bolsas debiera seguir lastrando a la renta variable. Las presentaciones de resultados de pesos pesados como Santander, Telefónica, Repsol, Red Eléctrica y Aena marcarán el camino de la bolsa española en las próximas jornadas bursátiles.
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